Allá por los años 50, se rodo una película con una trama
ciertamente sorpresiva para la época: LA GUERRA DE LOS MUNDOS.
Debido a lo fantástico de la trama y a que la misma versaba
sobre algo que hasta la fecha nadie se había planteado, se produjo una psicosis
colectiva que hizo que la población temiese a un agresor que no habían visto aun,
un agresor imaginario.
No cabe duda de que el humano es muy dado a las paranoias,
de ver fantasmas donde no los hay…de generar histeria colectiva por enemigos
imaginarios…en definitiva de ver realidades que ni están sucediendo ni van a
suceder.
También es cierto que cuando se fantasea con una cuestión hay
quien confunde realidad con ficción, quizás temeroso de una situación en la
que, de ser cierta, le suponga una amenaza para su presunto estatus…imaginad un
paranoico e inútil nuevo rico, que ve su patrimonio y sus privilegios en riesgo
ante un presunto enemigo cuasi irreductible….la histeria en este caso se
amplifica.
Ese nuevo rico, si para contrarrestar sus necios e irreales
pensamientos, hace bandera de esta paranoia en primera persona, corre el riesgo de quedar en evidencia cual Quijote contemporáneo al cargar contra algo que no existe…así correría el riesgo de parecer aun
mas imbécil de lo que ya es de por si…ahí entran en juego las marionetas…que
encima se lo creen (imbécil + imbécil= supra imbécil)…o algunos lo tienen claro
pero su pancismo les coloca en servidores leales a la pela.
Todo esto viene a colación de las numerosas manifestaciones
que me han llegado por privado en la que planteaban una presunta correlación
entre lo publicado y lo supuestamente real…ni que decir tiene que hablar de oráculo
ya deja de manifiesto el sentido del texto…aunque algunos pueden interpretarlo
de otra manera…algo que en definitiva me alaga.
Como persona a la que le gusta la música, siempre he tenido
especial predilección por las letras de canciones que puedan ser interpretadas
por el oyente desde múltiples puntos de vistas y que hagan recordar a los
mismos situaciones vividas o que les gustaría vivir…en positivo o en negativo…En
este caso me provoca una cierta mueca socarrona que mi texto pueda generar eso…Cada
día me sorprendo mas de las supuestas cualidades que inmerecidamente me atribuyen…Pero
más me sorprendo de las cantidades de orejas tiesas que aparecen cuando ponen
en la cartelera: LA GUERRA DE LOS MUNDOS.
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