Resulta extraño que en ocasiones nos empeñemos en ver
realidades a sabiendas o al menos con determinada intuición que no son reales.
Poseer determinada personalidad, ideología o simplemente filosofía
de vida, hace que defendamos cuestiones de una manera casi numantina a
sabiendas que todo lo que defiendes bajo ese paraguas está utilizando la
cobertura del mismo de manera interesada.
Sálvese quien pueda…amenazadores y amenazados…ese parece ser
el lema o como de pequeños…”cada uno por su bolsa”…sencillo y previsible.
Cuando te das de bruces con la realidad la verdad es que
jode…pero te levantas y sigues….y vuelves a caer…y así sucesivamente…cambiando
de entorno de manera continua a la espera de encontrar ese santo grial
imaginario.
Ciertamente desespera, aunque algo queda, sin duda…es
imposible que no sea así…como existe la misma dificultad de que en esta
sociedad alguien quiera seguir la línea…pero el ejemplo queda.
No sé si dentro de diez años, veinte o un siglo y medio,
pero se antoja inexcusable un cambio, a ser posible pacifico…pero algo tiene
que cambiar…desde los manipuladores que imponen sus mensaje parapetados en
falsas moralidades interesadas, hasta los que solo miran solucionar lo suyo
(aunque puedan coincidir la misma condición en ambas figuras) pasando los cobardes
que jamás tomaran iniciativas para nada.
Otro texto de filosofía callejera…otro texto que refuerza
las corazas…otro texto con intención de abrir ojos y mentes…y otro texto que tendrá
vuestra afectividad, con el que empatizareis solo hasta que llegáis al punto y
final.
Sin intención, pero con convicción…sobre todo con
perseverancia…me gusta ganarle a los malos, aun a riesgo de parecer el villano…aunque
a veces hay que hacer como Rambo…vivir día a día autoconvenciendote que esta
guerra no es tuya…eso si…hacedlo cuando al menos hayáis librado alguna batalla…si
lo hacéis sin ni siquiera combatir, os servirá de excusa, pero nunca de
solución.
No hay comentarios:
Publicar un comentario