jueves, 8 de septiembre de 2016

ACORRALADO...PERO NO REBAÑO

Resulta extraño que en ocasiones nos empeñemos en ver realidades a sabiendas o al menos con determinada intuición que no son reales.

Poseer determinada personalidad, ideología o simplemente filosofía de vida, hace que defendamos cuestiones de una manera casi numantina a sabiendas que todo lo que defiendes bajo ese paraguas está utilizando la cobertura del mismo de manera interesada.

Sálvese quien pueda…amenazadores y amenazados…ese parece ser el lema o como de pequeños…”cada uno por su bolsa”…sencillo y previsible.

Cuando te das de bruces con la realidad la verdad es que jode…pero te levantas y sigues….y vuelves a caer…y así sucesivamente…cambiando de entorno de manera continua a la espera de encontrar ese santo grial imaginario.

Ciertamente desespera, aunque algo queda, sin duda…es imposible que no sea así…como existe la misma dificultad de que en esta sociedad alguien quiera seguir la línea…pero el ejemplo queda.

No sé si dentro de diez años, veinte o un siglo y medio, pero se antoja inexcusable un cambio, a ser posible pacifico…pero algo tiene que cambiar…desde los manipuladores que imponen sus mensaje parapetados en falsas moralidades interesadas, hasta los que solo miran solucionar lo suyo (aunque puedan coincidir la misma condición en ambas figuras) pasando los cobardes que jamás tomaran iniciativas para nada.

Otro texto de filosofía callejera…otro texto que refuerza las corazas…otro texto con intención de abrir ojos y mentes…y otro texto que tendrá vuestra afectividad, con el que empatizareis solo hasta que llegáis al punto y final.


Sin intención, pero con convicción…sobre todo con perseverancia…me gusta ganarle a los malos, aun a riesgo de parecer el villano…aunque a veces hay que hacer como Rambo…vivir día a día autoconvenciendote que esta guerra no es tuya…eso si…hacedlo cuando al menos hayáis librado alguna batalla…si lo hacéis sin ni siquiera combatir, os servirá de excusa, pero nunca de solución.

No hay comentarios:

Publicar un comentario