Bueno, como dije ayer, gracias a buenos amigos estoy en
clave de reconsideración.
En este caso, uno de esos buenos amigos que me piden que no
cierre este espacio y que además no lo deja en un mero apoyo moral sino que me
ofrece su colaboración para mantenerlo activo, algo que agradezco enormemente
me ha hecho llegar este texto que retrata claramente lo que podria ser un ejemplo de como los sátrapas sociales,
que haberlos hailos en todos los ámbitos, pretenden acceder a la mamela de cobrar por el
trabajo que no hacen y por el que ni siquiera han peleado en su momento.
También deja de manifiesto como las ordas de presuntos trepas y aprovechados sociales
de determinados ámbitos no dudan incluso en acudir a prensa favortable contando
la milonga del marinero que les lleve a chupar del bote de la lucha de otros y
por un trabajo que ni hicieron y que presumiblemente no harán…perfectamente
puede ser esto el retrato fiel de lo que hace cualquier vecino de los lectores
de estas líneas.
El articulo no tiene desperdicio, vereis;
UN BONITO CUENTO PARA ALGUNOS POLICÍAS DESMEMORIADOS
Hace muchos, muchos años “en esta hermosa ciudad a la que nos debemos” existió un Rey apodado “mienteserrín. Este Rey tenía un consejero apodado “el árbitro” al que se le ocurrió la genial idea de dotar de scooters algunos distritos de la ciudad para que los policías pudieran hacer su trabajo más eficazmente. Nadie solicitó esas motos, a nadie les gustaban pero un buen día las presentó como novedad en el servicio.
Al poco tiempo las scooters cayeron en el olvido porque nadie las quería coger. Todo el mundo renunciaba a ellas, salvo en los planes de productividad donde algunos para librarse de los cortes decían que ellos montaban en motos.
Con la llegada de otro consejero se volvió a intentar montar este servicio en los distritos. Para ello se compraron nuevas motos y se destinaron a algunos distritos a policías que procedían de la unidad de motoristas para que fueran ellos los que cogieran esas motos. Pero nuevamente, salvo alguna que otra excepción, las motos fueron a parar “al cementerio de elefantes”, los policías que provenían de la unidad de motoristas poco cogieron las motos en los distritos. Poco a poco y tras un compromiso de 2 años, por cuestiones de vestuario, las motos comenzaron a arrinconarse presentando algunas de ellas un estado lamentable de abandono, todavía se recuerda las motos del Distrito de Triana en Alfa 3 totalmente comidas de mierda y abandonadas. Tanto fue así que se dio la orden de comenzar a retirar las motos de algunos de los distritos.
Pero vete tú por donde que hace 3 años, cuando los policías que cogían las motos en los distritos estaban en peligro de extinción, a los motoristas de la unidad de tráfico les dio por manifestarse contra su Rey, el apodado “torrebruno” y exigir la negociación de un acuerdo que llevaban tiempo reclamando donde se les reconociera la peligrosidad por el trabajo que desarrollaban.
Las concentraciones que se produjeron estaban apoyadas por un grupo de Robin Hoods, si esos que al parecer tienen connivencia con el consejero del actual Rey, que no dudaron ni un solo momento en sumar a la causa a los poquitos policías que cogían motos en los distritos. La batalla fue larga y dura y durante el tiempo que duró fueron muchos los que sucumbieron a la desesperanza y abandonaron la lucha, pero sorprendentemente entre los policías que supuestamente cogían las motos en los distritos no las hubo por que, salvo raras excepciones, nunca aparecieron por ninguna batalla en Plaza Nueva.
El Rey “torrebruno” fue derrocado y fue sustituido por otro Rey, el apodado “el espadachín” que nombro consejero al apodado “güena gente”.
El nuevo consejero rápidamente atendió a las reclamaciones de los policías de la unidad de traficó y pronto llegó a un acuerdo para reconocer la peligrosidad de los trabajos realizados en motos. Rápidamente de los distritos comenzaron a salir policías que montaban en moto hasta de debajo de las piedras. El grupo de Robin Hoods que habían apoyado a los policías de la unidad de motoristas en las concentraciones les dijo que no se preocuparan que ellos también iban a disfrutar de ese acuerdo pero que había que ver quien en verdad cogía las motos en los distritos. Pero cuando nunca antes se había mojado apareció un falso Robín Hood apodado el “intrépido Rober”, este falso Robin Hood comenzó a enrarecer el ambiente y a ser el abanderado de unos pocos que durante todo este tiempo habían estado escondidos.
Al poco tiempo los policías de distrito que montaban en moto comenzaron a disfrutar del acuerdo que con su lucha habían conseguido sus compañeros de la unidad de motoristas. Pero claro como la cabra siempre tira para el monte, algunos con el paso del tiempo comenzaron a relajarse y a disfrutar del acuerdo sin coger motos. Llama poderosamente la atención el caso de un policía que, además es consejero del falso Robin Hood, que prácticamente ha cogido la moto 2 telediarios, porque amparado por su mando es el que se queda en la oficina preparando los servicios del resto de policías de su unidad.
Ante todo esto el consejero del Rey decide reestructurar los trabajos de los policías de distrito que supuestamente cogían motos y toma una decisión que al parecer a algunos no ha gustado, entre ellos al falso Robin Hood y hoy en un medio de comunicación suelta una serie de milongas que no se las cree ni él, porque se pueden contar con los dedos de una mano los policías de los distritos que han cogido motos y los días que la han cogido.
Una vez más el abuso que han cometido algunos ha acabado con un servicio que ni funcionaba y que nunca había funcionado porque la mayoría de los policías de los distritos se escaqueaban de coger la moto.
PD: Sé que este cuento no le va a gustar a algunos, pero me da igual, creo que hay que desenmascarar a los caraduras y vividores que ahora se dan golpes en el pecho y venden que son los que más motos han cogido durante estos últimos años. Este cuento no generaliza, dentro de los distritos hay muy buenos policías que han cogido siempre las motos, desgraciadamente ellos son los que se han visto perjudicados por un grupo de vividores que sólo miran su ombligo, son la máxima expresión del egoísmo y de forma agazapada siempre están calentando al personal.
Si algún apodo o referencia ha molestado a alguien le pido disculpas por que no es mi intención.
Lo escrito aquí es una opinión personal
Santiago Raposo López